9/08/2016

Molino casi en ruinas en León (demolido)

Se cuentan muchas historias acerca de sitos abandonados con relatos más o menos ambiguos que acaban teniendo como resultado una tétrica leyenda contada a cada cuál de una manera distinta y con acontecimientos que varían, haciendo de cada versión un mundo. 
Hoy traigo un edificio cuyo uso era el de molino y a la vez vivienda situado en el mismo pueblo de la casa cuyo post subí hace casi un año, con el comienzo del blog (http://decayenasturias.blogspot.com.es/2015/10/en-primer-lugar-quiero-dedicar-este.html).
Este molino fue el protagonista de muchas historias que la gente contaba a los niños pequeños con el fin de que no se acercasen al él, ya que el sitio está en ruinas y es bastante inestable. 
Al final de la publicación procederé a relatar algunas de estas historias que fueron contadas y que ahora el 'temor' que se les mete a los niños para que no se acerquen se resume en un simple 'El molino está en ruinas y es peligroso entrar'. 
Una vez dicha la introducción, como de costumbre procedo a mostrar las fotos (que esta vez no son pocas):
Esta es una de las que más me llamó la atención, así que la pondré la primera.


Detalle de una telaraña en la ventana.





Vista desde la puerta de la anterior foto. Parte de estas fotos son de hace un año aproximadamente.




En cambio esto fue más reciente. Me costó saber que era un gato.








Por aquí se sube a las plantas superiores. La otra subida son unas escaleras destartaladas.









Por la parte de atrás del edificio es por donde se puede entrar, aunque la cantidad de hierbajos y avispas no colaboran.







Las escaleras que más o menos se conservan bien. A pesar de ello el sonido que hacen al pisarlas hace que parezca que el sitio se va a venir abajo.






Lo primero que se ve al subir las escaleras. El mayor problema es por dónde pasar, ya que intentando seguir las vigas el suelo prácticamente no se ve (sólo con mirar la foto las razones se obvian). 




Ahora llegamos a la parte que era una vivienda:


















Parecen raíces, al menos a mi vista.


Poniendo atención en esta foto en especial, vemos un columpio. Esto dio cabida a muchas historias. Hay gente que dice que a veces el columpio se mueve solo.
A pesar del mal estado del edificio, el columpio aguanta el peso de una persona a la perfección.


Unas escaleras hacia la nada.



Ahora llegamos a una de las partes usadas como molino:










Bajando por las escaleras, atravesando una puerta que da a esta sala, nos encontramos con otra parte del edificio totalmente desconocida para mí. También he de decir que sólo he venido dos veces a este sitio.




Las escaleras de las que hablaba al principio eran estas, No dan mucha confianza.



Ahí dentro había agua. No sabemos a cuanta profundidad, pero había agua.



Una de las historias que me contaron fue esta
''Antes por este pueblo pasaba un río decente y eso hacía  que funcionara el molino. Había una familia que vivía  allí  y se ocupaba de él. Tenían una hija y le hicieron el columpio que está  en el piso de arriba y luego hay gente que dice que la niña murió y que su espíritu se columpia de vez en cuando''.
Otras historias añaden el detalle de que la niña que vivía allí era paralítica, y por eso el columpio estaba dentro de casa (antes estaba mal visto que la gente inválida saliera a la calle y hacían toda su vida dentro de la casa en la que vivían). Otras personas comentan que esta niña se suicidó, etc. Las variaciones de esta historia nadan en la abundancia como podemos ver.

Con esto finalizo el post de hoy.
Traigo entre manos un proyecto bastante grande. Tanto que lo tendré que dividir en varias publicaciones.

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