10/13/2020

La casa/escuela de la valla azul

Caminando colina arriba de una montaña, metida entre la maleza encontramos una casita muy modesta que lleva abandonada bastantes años parece ser. Eso o que el clima y la humedad del norte la ha tratado muy mal, o una mezcla de ambas cosas. La primera vez que visité este sitio fue en 2017 y mi última visita a este sitio fue el año pasado y apenas se podía subir a la planta superior de la casa, al balcón se lo había comido la maleza y  la madera estaba abombada hacia abajo. Pero eso viene luego, ahora nos vamos a centrar en la parte de la escuela:

La fecha en la que esta escuela cumplía su función se data a mediados del siglo pasado. La clase consta de 6 pupitres si no recuerdo mal, aquí dejo las fotos:
 
 
 
Como se puede ver la clase está en muy mal estado, llena de humedad en las paredes, de goteras y posiblemente el destrozo de la pizarra que se ve apoyada contra la pared haya sido parte de un acto de vandalismo, ya que como podremos ver después en la casa está todo tirado por el suelo y los cajones sacados del sitio.




La puerta que daba a la entrada (cuya puerta está cerrada y no se puede abrir) tenía unas cortinas que estaban amarillas del paso del tiempo. No obstante me pareció un detalle bonito que hubiera esta cortina decorando una puerta de cristal.

Aquí se puede ver el estado del que hablaba antes. Los pupitres están llenos de escombros que han ido cayendo del techo.

 
 Esto estaba pintado en la pared a lápiz, ¿cuántos años debe tener?

Detalle e una de las ventanas cerradas.

Ahora pasamos a la parte de la casa. Se entra por una verja de madera azul que tiene colgada un buzón. El camino para entrar está lleno de barro, ramas y hojas secas, además de un montón de zarzas en la entrada.

 
 



Entrando en la casa vemos que lleva abandonada mucho tiempo. Hay una habitación en la que no se puede apenas entrar porque el suelo es un agujero enorme y no entra la luz, está todo mojado por la humedad en la planta de abajo y hace más frío que afuera, y está todo cubierto por telarañas negras.

Los estantes de la entrada debía ser la despensa. Estaba lleno de comida, de hecho había una tableta de turrón si no recuerdo mal ya empezada, e increíblemente no se había descompuesto (no la probé por si te lo estás preguntando).

Subiendo por unas escaleras de madera que dan muy poca confianza llegamos al piso de arriba. No tengo foto de ellas pero están sobre un saliente de la pared que está abombado hacia afuera, y el tramo superior de escaleras está prácticamente en el aire. O sea que subes sin saber si vas a volver al piso de abajo contra tu voluntad y pegarte la leche de tu vida.
Nada más subimos encontramos un pequeño hall. Está todo tirado por el suelo: mantas, bolsas, periódicos, revistas... Incluso el armario está en medio de esta sala, así que quien sea que se metiera aquí tuvo la esperanza de encontrar algo importante aquí, porque ya me dirás tú el fin de mover un armario de los antiguos con puertas de critstal al medio de una sala para nada.
Esto estaba cogado de un clavo a la pared.
Más ropa colgada de las vigas. Es muy usual encontrarse en casas antiguas cosas colgadas de las vigas, ya sea ropa, utensilios de cocina, etc. Es una forma muy útil de guardar espacio en vez de ocupar media pared con un perchero, teniendo en cuenta que esta casa es bastante pequeña.

Este era el dormitorio del director de la escuela. Creo que no me dí cuenta de decirlo antes pero la casa estaba pegada a la escuela. La separa la valla azul del buzón. Dicho esto procedemos a hacer un room tour por la habitación de Salvador:

Un cartelito por si la otra persona que vivía en la casa se hace un lío y se olvida de cuál es su dormitorio.



No le hice muchas fotos a este cuarto porque la verdad, me daba bastante respeto por algún motivo y acabé saliendo pitando de ahí. ¿Quizá por el crucifijo de la pared? Poco probable porque no es la primera vez que me topo con uno pero sí la vez que este es de buena calidad. Los anteriores que había encontrado eran de madera pintada y plástico. 

Saliendo al rellano vi un par de cosas que me llamaron la atención. La verdad que no voy a volver a este lugar por el mal estado en el que debe estar, no me quiero llevar un disgusto que me dure una semana, pero también me arrepiento de no tener un reportaje más extenso mostrando lo que había en los armarios, fechas concretas de la defunción de los inquilinos de la casa, etc. Pero bueno, ahora ya no se puede hacer nada más que mostrar lo que ya tenemos. Además pisar este suelo es una trampa mortal porque está lleno de agujeros y al estar todo el suelo lleno de cosas no sabes dónde pisas. Pero bueno al grano:


Luego en el otro cuarto había bastante más cosas. Dato gracioso (para mí no): metí la mano en una mesilla de cama y toqué un reloj, y al cogerlo cogí de paso otra cosa dura, y al sacar ambas cosas me di cuenta de que la otra cosa era una DENTADURA (sin dientes). Casi me muero del asco allí mismo me dio la mayor arcada de mi vida. Prosigo enseñando cosas de la habitación: un libro de creacionismo y otro de fotografía analógica con pruebas de revelado.
                                

La palangana por si a Laureano le daba el vértigo y tenía que echar la cena por la noche. Creo que el otro inquilino se llamaba así porque había varios papeles a su nombre, lo que no sé es si desempeñaba alguna función en la casa. Pude preguntar a los vecinos pero no me atreví porque tenían miradas desafiantes cuando uno pasaba al lado suyo. 
 
Atravesasndo la habitación había un hilo con perchas haciendo la función de tendal.

Y encima del pie de la cama unos botecitos con chinchetas, un paraguas de plástico con un dragon 'tallado' en el mango y un manojo de llaves. Las llaves se me desbalaron junto con uno de los botes y se metió en el paraguas, y por miedo a que hubiera un bicho ahí se quedaron.
También había muchas libretas, algunas escritas con cuentas, otras con frases y había una que tenía una cita de Ramón y Cajal en la pasta del principio.
Tirados en el suelo había un montón de documentos, papeles, cartas, y una esquela que une a Salvador, el de la otra habitación y a Laureano, el que sospecho que ocupaba esta última. La esquela era del hermano de ambos, fallecido a los 63 años en el año 1982. No tengo ningún archivo de otra esquela ni fotos de papeles, y tampoco recuerdos de memoria de decir: Vale, la última fecha que ví fue este año. Aunque casi seguro que se abandonó esta casa antes de la entrada del S. XXI.
 

Las últimas fotos destacables de este reportaje son las vistas desde las ventanas que no están tupidas. Solo se ve vegetación, para que os hagáis una idea de cómo se ve desde fuera(pista: apenas no se vé la casa).


Y con esto finalizo el post de hoy, el único que he subido de este año y del año pasado. Me he hecho de rogar bastante porque he estado pendiente más a la cuenta de instagram, a parte de un parón en coger la cámara, pero en ningún momento haber dejado de visitar estos lugares. Tengo más material en el carrete esperando a ser expuesto, e intentaré retomar este blog e ir subiendo cositas que he hecho con la cámara de lugares que ya había ido anteriormente e ir mostrando sitios nuevos.




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